martes, 25 de octubre de 2011
¡Hola! ¿Cómo están?
lunes, 15 de noviembre de 2010
EL MILAGRO DE MI SALUD.
martes, 6 de julio de 2010
¿Qué le pedirías a Dios si supieras que mañana vas a morir?
viernes, 2 de julio de 2010
El tiempo pasa y seguimos igual.
martes, 25 de mayo de 2010
NO LO DIGAS ¡HAZLO!
Aunque muchas otras veces decimos que sí a lo que Dios nos pide a través de su palabra o invitaciones a trabajar en la iglesia, mínimo a asistir a un evento, a un culto o a participar en un ministerio, pero sabemos que en el fondo no lo queremos hacer.
Jesús en su maestría con la que compartía sus enseñanzas nos lo ilustró con los dos hijos, a los que su padre les pide cariñosamente su ayuda en algo justo y correcto; uno dice que sí lo iba a hacer, pero no lo hizo y otro que fue sincero, le dijo que no tenía ganas de hacerlo, pero reflexionando, se arrepiente y lo hace.
Los dos eran sus hijos; a los dos el que se les acerca es su padre, no ellos a él; a los dos les habla cariñosamente (el término griego para hijo así lo indica); a los dos les pide algo justo. La diferencia no está en el Padre sino en cada hijo. Uno, era (como los fariseos) de los que dicen y no hacen -según las propias palabras de Jesús-; el otro aunque no tenía las ganas, ya que realmente lo que buscaba hacer era su voluntad y no la voluntad de su Padre, meditó, reflexionó y sobre todo se arrepintió y prefirió hacer la voluntad de su Padre antes de su voluntad.
Cuando nos enfrentamos a esta narración irremediablemente nos tenemos que comparar con alguno de los hijos ¿tu eres de los que dicen y no hacen? ¿eres de los que ni dicen ni hacen? mejor NO LO DIGAS ¡HAZLO!
martes, 18 de mayo de 2010
¡HAZLO SEGÚN TUS FUERZAS!
Dios nos pide que aprovechemos bien nuestra vida, ¡estamos vivos! Eso es lo importante. ¿Qué es mejor? ser alguien poderoso pero muerto o ser alguien no tan poderoso pero vivo. Eclesiastés nos dice que es mejor ser "perro vivo que león muerto".
Todo lo que tengas por oportunidad para hacer hazlo. Cuando pasa el tiempo nos arrepentimos de todo lo que pudimos haber hecho y no lo hicimos; el pasado ya no se puede arreglar, pero lo que hoy tienes por delante por hacer, que es mucho, dice Dios, hazlo, hazlo teniendo solo este parámetro: según tus fuerzas.
Eso hace el que es sabio, no te compares ni con los más débiles ni con los más poderosos, no te compares ni con los más ricos, ni con los menos ricos; Dios dice hazlo según tus fuerzas. Hay sabios que así lo hacen y esto los hace más sabios, aún cuando a los demás les parezca que no es bueno lo que hacen. Dios dice que es mejor ser sabio que ser poderoso, ser sabio que ser rico, porque no necesariamente el que es rico es sabio ni el que es poderoso es sabio, por eso, todo lo que puedas hacer ¡hazlo según tus fuerzas!